Entre los pilares del equipo, los navarros Dimitri e Ibai destacaron sobre la cancha con un juego sólido y combativo, mientras que Martina Goñi, como segunda entrenadora junto a Paco Monreal, fue clave en la preparación y liderazgo del grupo.

España estuvo muy cerca de conseguir la medalla de bronce, pero el golaverage general les dejó fuera por un solo gol frente a Lituania (selección a la que se venció en el duelo particular), reflejo de lo ajustado y competitivo que fue el torneo. Este resultado pone en evidencia que el equipo tiene el nivel para pelear en las primeras posiciones y que, con más formación y experiencia, puede volver a situar a nuestro goalball entre los mejores de Europa.

La aportación de estos tres navarros es una gran noticia para el futuro del goalball en Navarra y España, un proyecto que promete seguir creciendo para llegar muy lejos.