Paula Ostiz ha escrito una página dorada en la historia del ciclismo español al conquistar el Tour de Flandes en categoría júnior. La navarra, de apenas 18 años, se convirtió en la primera ciclista española en imponerse en esta emblemática clásica belga, tras una actuación magistral en solitario.

La carrera, disputada sobre un duro trazado de 73,8 kilómetros con ocho tramos adoquinados y cinco colinas, se decidió en la subida al Wolvenberg, donde Ostiz lanzó un ataque demoledor que ninguna rival pudo seguir. Antes, ya había mostrado su ambición en el Achterberg, donde neutralizó un intento de escapada de la francesa Poirier y seleccionó el grupo junto a la neerlandesa Arens.

Con una preparación marcada por la adversidad —una fractura en la mano sufrida en enero la mantuvo dos meses alejada de la competición— Ostiz demostró su carácter y determinación. Recién recuperada, entrenó en altura junto a su hermano Raúl y regresó al pelotón con un segundo puesto en el Tour de Guevaudan. Para Flandes, sin plaza con la selección española, se integró en el equipo belga Mix2 Parike Leio, buscando por su cuenta el sueño que acabó cumpliendo con una gran victoria.

Este triunfo se suma al título europeo de contrarreloj sub-19 logrado en 2024 y al subcampeonato mundial en ruta, confirmando a Paula Ostiz como una de las grandes promesas del ciclismo femenino. Con ambiciones claras y el ejemplo de Annemiek van Vleuten como referencia, la pamplonesa ya ha dejado su huella en uno de los templos sagrados del ciclismo mundial.