Será la tercera participación de España en una cita paralímpica tras los Juegos de Barcelona 92, a los que acudió por ser país anfitrión, y los de Tokio 2020, ya por derecho propio.

En París sólo estarán los 8 mejores equipos del mundo por primera vez y entre ellos estará España. El equipo tiene calidad de sobra y ya no mira con complejos a nadie. De hecho, se quedó a las puertas de lograr la clasificación directa el pasado verano en el europeo.

Sólo lograban el billete los equipos finalistas. España fue tercera, se colgó el segundo bronce de su historia pero le quedó una espinita que se ha sacado hoy ante Tailandia.

Llegaba al partido decisivo de la repesca (había cuatro billetes en juego) como segunda de grupo tras haber vencido a Francia (57-38) y Japón (64-45) y perdido contra Canadá (49-77).

 Exhibición española

Las jugadoras de Franck Belén solventaron sin dificultad el choque contra las asiáticas, a las que endosaron un parcial inicial de 11-0 que ya hablaba muy a las claras de las intenciones de España. No cedieron terreno en ningún momento y cerraron el primer cuarto con una ventaja de 18 puntos (27-9) que fue una losa insalvable para su rival, muy inferior en la pista. Una diferencia que se ampliaría hasta 22 justo antes del descanso.

Tras él, España pudo jugar a su antojo con una cómoda ventaja que le permitió desplegar todo su juego y potencial. Franck Belén, con el billete ya en el bolsillo, rotó a todo su banquillo para que todas las jugadoras tuvieran protagonismo y participasen de una victoria que significaba mucho más. Significaba volver a unos Juegos Paralímpicos por segunda vez consecutiva, significaba demostrar que este equipo, en cuanto ha tenido recursos para poder concentrarse y entrenar, ha dado un paso al frente.

 

Muy lejos quedan las penurias y sinsabores que tuvieron que vivir las pioneras del baloncesto en silla e incluso algunas de las jugadoras que aún hoy siguen en la plantilla, como es el caso de la capitana Sonia Ruiz. Cuando ella empezó a jugar apenas había 4 o 5 mujeres que practicasen baloncesto en silla en España. Hoy nuestra selección está entre las 8 mejores del mundo.

Los últimos diez minutos fueron de trámite para España, que aun así siguió a lo suyo enlazando canastas en el aro rival sin demasiada oposición con Beatriz Zudaire como líder del ataque con 21 puntos, 13 rebotes y 9 asistencias, lideró al combinado nacional, aunque las 12 españolas jugaron y anotaron al menos un punto durante el partido.

 

 

Fuente: marca.com

 

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