Intersport Irabia BRT 10 - Eibar Hierros Anetxe RT 11
Alineación Irabia Intersport BRT: Mutilba, Ander, Txoperena, Muñoz, Terreros, I. Goienetxe, J. Barberena, Ezkurra, Apezetxea, I. Barberena, Urrutia, Saldias, Villanueva, Gotzila y Juvera.
También jugaron: G. Goienetxe y Billabona .
Vibrante e igualado partido el que jugaron el sábado por la tarde en Lekarotz navarros y guipuzcoanos. El encuentro estuvo marcado por las inclemencias del tiempo que dejaron el terreno de juego “hecho unos zorros” a causa del barro, lo que provocó un gran número de imprecisiones.
El Interesport Irabia Baztán Rugby Taldea plantó cara al sólido líder del grupo al que fue ganando todo el encuentro hasta los últimos compases del mismo.
El 15 local comenzó adelantándose mediante un golpe de castigo al inicio del partido, aunque poco duró la alegría ya que, enseguida, el Éibar consiguió empatar de la misma forma.
Hacia la mitad del primer acto el joven juvenil Mattin Apezetxea encontró un hueco en la defensa rival para colarse hasta la zona de ensayo y posar el cuero ante la sorpresa de los visitantes y el regocijo de los anfitriones. La posterior transformación, no solo colocó el 10 a 3 en el luminoso, sino también trajo la gran noticia para los azules de que los jóvenes vienen pidiendo paso desde abajo.
El experimentado equipo eibarrés, “escocido” por esta marca, forzó la máquina y escasos minutos después lograron ensayar, para estrechar el marcador hasta el 10 – 8 con el que acabó la primera mitad.
La segunda parte fue muy dura, en la que las defensas se impusieron a los ataques, si bien la mayor parte del tiempo el juego se desarrollaba en campo del Baztán. El equipo guipuzcoano llevaba el peligro mediante patadas a la espalda de la defensa baztanesa y presionaba arriba con fuerza, provocando que a los locales les costara Dios y ayuda sacar el oval de zona de peligro.
Una muestra de la dificultad con la que se desarrolló el partido es el gran número de balones adelantados en los que incurrieron ambas escuadras, tanto en malas recepciones como por resbalones; ya que la lluvia y el lodo dificultaban tremendamente la manipulación del cuero.
La jugada clave se produjo a falta de un minuto para la finalización: el señor Rodríguez Rigat, árbitro de la contienda, erró en la apreciación de una falta que debió favorecer a los locales y cayó del lado visitante. El pateador eibartarra agradeció el regalo y puso el definitivo 10 a 11 con el que concluyó el partido, dejando un regusto agridulce a las huestes de Iñaki Bengoetxea, ya que el punto conseguido sabe a muy poco una vez visto el desarrollo del choque.
Puedes consultar la clasificación en este documento.