El pasado fin de semana se celebró en las aguas del Guadalquivir a su paso por la ciudad de Sevilla, el Campeonato de España de Remo Olímpico (o de Outriggers) por clubes,  que se disputó para las modalidades juvenil, sub 23, absoluto, veterano y adaptado, tanto en categoría masculina como en femenina.

En esta ocasión la participación por parte de los dos clubes navarros fue escasa, y de la mano, resultados moderados, en una temporada donde la crisis hace notar la falta de regatas para una óptima preparación en los clubes pequeños.

En una de las categorías donde hubo más nivel, el doble scull absoluto masculino, pudimos disfrutar durante todo el fin de semana de grandes regatas y un buen pique interno entre los botes de Remo Lodosa (con Xabier Eraúl y Iosu García) y Regatas de Alicante, donde rema el remero sartagudés Endika Sáenz.

En la jornada del viernes, el duelo durante las tandas eliminatorias fue para el lado lodosano, que pasó cómodamente a semifinales marcando el séptimo mejor tiempo. Alicante, con Endika como tripulante, no pudo pasar a semifinales directamente y tuvo que tomar la plaza de semis en las repescas del sábado a la mañana.

El sábado a la tarde, semifinales. Los dos botes tenían opciones de entrar en la final, en las regatas previas habían marcado el séptimo y octavo mejor tiempo estando a solo a 3 segundos de la sexta plaza, que ya tiene lugar en la final. Sólo debían mejorar su remada y apurar al máximo su físico. Cada equipo iba en una semifinal, siendo algo más dura la del equipo lodosano. Ambos apostaron fuerte y salieron a morir intentando dar la sorpresa, y fueron en cabeza de regata de sus respectivas semifinales hasta que el esfuerzo extra les hizo pagar su rendimiento en los metros finales. Ninguno de los dos equipos pasó a la final, pero el equipo de Endika quedó a escasas centésimas de lograrlo.

El domingo ya estaban fuera de la final, pero quedaba por ver quién era el equipo compuesto de remeros navarros más fuerte en un duelo directo que aún no se había disputado. El duelo prometía, puesto que ambos equipos habían demostrado estar a un gran nivel y con opciones de entrar en final, pero desafortunadamente el equipo lodosano tuvo una mala salida y resultó una final B descafeinada donde Endika ganó el duelo a Lodosa con relativa facilidad.