• Ambos se convierten en los dos primeros pelotaris del otro lado de la muga que alcanzan un título de parejas en el trinquete profesional.
El domingo pasado se celebró en el Trinkete Moderno de Baiona la Final del Campeonato de Parejas de Trinquete de Francia, en el que la pareja navarra compuesta por Luis Sánchez e Iker Espinal hicieron historia tras conquistar el título venciendo a la dupla local integrada por Mathieu Ospital y Peio Guichandut (38/40) en un partido marcado por una tremenda exigencia física.
De este modo Luis e Iker se convirtieron los dos primeros navarros que consiguen hacerse con un título de parejas en el trinquete profesional al otro lado de la frontera.
Contra todo pronóstico
El coso bayonés, repleto de un enfervorizado público que no dejó de animar a los suyos en ningún momento, vistió sus mejores galas para albergar esta gran final donde Ospital y Guichandut partían como claros favoritos para calarse la txapela de campeones.
Suyas fueron las primeras ventajas en el partido, exhibiendo un juego muy sólido, siendo inexpugnables en defensa y certeros en ataque, sobre todo con su material. Así marcaron un parcial de inicio de 6 a 1 que puso las cosas muy difíciles a los navarros que prácticamente fueron a remolque durante todo el choque.
De todas formas, Luis e Iker no se “arrugaron” y lograron “darle la vuelta a la tortilla”, poniéndose por delante en varias ocasiones como en el 13/18 o en el 14/21.
Pero la pareja local, llevada en volandas por un público ruidoso y entregado, reaccionó endosando a los navarros un parcial de 7 a 0 que, otra vez les colocaba “de cara” en el tanteador.
El de Baiona y el irisartarra continuaron dominando el juego y llegaron a la fase decisiva del partido con un 38 a 35 que parecía definitivo. Pero Luis Sánchezbdio un paso adelante, se echó la pareja a la espalda y fue enjuagando la ventaja poco a poco para primero igualar el luminoso y después hacerse con la victoria con un pelotazo a la ventana del rebote, que puso el 38 a 40 con el que Sánchez y Espinal enmudecieron a la bombonera baionesa y firmaron con letras de oro en el libro del trinkete profesional, siendo los primeros pelotaris “del otro lado de la linde”, en vencer en el torneo de parejas.
Cansancio y felicidad
Ambos se mostraron exultantes tras finalizar el partido, manifestando que había sido un partido muy exigente: “solo me he creído que ganábamos cuando estábamos en el 40. Ellos no tenían puntos débiles ni huecos y hemos estado todo el rato cuesta arriba. Lo importante era no bajar los brazos y sabíamos que defendían mucho y con su pelota jugaban increíble. Ha habido tantos muy duros”, explicaba Luis Sánchez, que lograba su segunda txapela en el campeonato de parejas.
Para Iker Espinal, que acabó el partido con calambres en los cuádriceps, obtenía el triunfo en el año de su debut en el campeonato y confesaba que “detrás de todo este había mucho trabajo”: Es increíble ganar una final que ha sido muy difícil para mí, porque todo era nuevo. Pensaba que estaba acostumbrado a jugar con esta presión, pero... soy campeón después de dos años aquí y en mi primera final. la txapela es como poner la guinda a un año magnífico”.
Fuente y Foto: DN