Recientemente, los chavales de la Escuela Taller de Atención Integral a la Dependencia y Diversidad Funcional de Cruz Roja, llevaron a cabo una clase en la capital ribera que fue todo un éxito.
Todos ellos, muy concienciados y empáticos con la situación de todas las personas con diversidad funcional, estuvieron viendo el porqué del deporte adaptado y pudieron practicar diversos disciplinas deportivas en las que, con ayuda de un kit de envejecimiento de Cruz Roja, se les inutilizaban extremidades o, con pesos, se les complicaba la movilidad total, con el fin de que entendiesen la sensación.
Además, a lo largo de toda la mañana, visionaron varios vídeos en los que pudieron ver cómo hay muchas personas que hacen vidas igual de normales que las suyas y, además, hacen deporte. Se sintieron en la piel de diferentes discapacidades motoras.