Maite Resano, a la cabeza del Club Rítmica Alaia, junto al resto del equipo técnico (Silvia Uhalte, Sara Oyón y Maite Crespo), nos cuenta cómo están viviendo estos días de confinamiento y resalta la motivación y la constancia de todos y todas las gimnastas del club. 

De una día para otro hubo que cambiar el tapiz por el suelo de casa, ¿de qué manera estáis haciendo más llevadero el confinamiento?

El equipo técnico de Alaia organizó un planning semanal para seguir trabajando día a día desde casa.

Aunque en condiciones más limitadas, ¿continuáis con la planificación deportiva?

Las entrenadoras estamos contentas de cómo han respondido todos y todas las gimnastas de Alaia al planning semanal.

¿Qué tipos de ejercicios se pueden hacer en casa?

Les hemos dado trabajo para trabajar la flexibilidad, la preparación física y también un calentamiento específico.

¿En algún momento habéis sentido enfado, frustración o desconcierto? 

No, debemos adaptarnos a la situación. Las personas que estamos en el mundo del deporte estamos acostumbrados a asumir nuevos desafíos. Y este es uno de ellos.

Se ha caído todo, Campeonatos Navarros, Campeonatos de España... ¿Cómo veis la situación? 

Sí, a día de hoy muchos eventos se han aplazado y otros suspendidos, ¡pero volveremos a abrazarnos!

¿Cómo hacéis con las chicas del equipo para entrenar?

Hasta ahora las gimnastas trabajaban el planning de rutinas que les enviamos; ahora que se va a alargar en el tiempo, hemos organizamos videollamadas grupales del equipo técnico con todos y todas las gimnastas, ¡y la verdad que dan un chute de energía!

¿Cómo se están comportando?

¡Súper! A día de hoy tienen mucha motivación para asumir nuevos retos y son súper constantes en el trabajo.

¿Qué mensaje lanzaríais desde aquí al resto de compañeros y deportistas?

Mucha fuerza y ánimo a todos, que sean responsables por prevención y calma porque todo volverá a la normalidad.

A nivel más personal, ¿cómo pasas el rato? ¿Has encontrado algún juego que tuvieras olvidado?

A las mañanas, me toca ayudar a mis hijos con las tareas escolares; y nos dejamos la tarde libre para hacer ejercicio físico, manualidades, repostería, bailes, películas, juegos de mesa... 

¿Nos cambiará la forma de ver la vida después de esta situación?

¡Espero que sí! ¡Alguna enseñanza sacaremos de esto!

Ojalá este parón nos haga reflexionar, y nos paremos a pensar en las cosas realmente importantes que debemos valorar.