Con el objetivo principal de preparar el Campeonato de España de Duatlón Sprint que se celebrará este sábado 10 de abril en Avilés, se realizó una doble jornada en Elkarte, un pueblo cercano a Pamplona, ideal para hacer una jornada de múltiples transiciones, debido la escasa circulación de vehículos por la zona y por la seguridad de disponer de un lugar amplio (frontón) para guardar las bicicletas y realizar diversas mediciones.

La primera jornada estuvo dirigida a los y las triatletas de categorías cadete y juvenil que competirán en distancia supersprint en Avilés (2K correr, 5K ciclismo y 1K correr). Fue una jornada un tanto lúdica con una competición por parejas mixtas, en la que cada triatleta realizó dos veces un circuito de 800m correr, 2K ciclismo y 800m correr.

La segunda jornada estuvo dirigida a los y las triatletas de categorías júnior y sénior, los cuales competirán en distancias supersprint y sprint, respectivamente, en Avilés. En esta jornada, y unida a la próxima jornada formativa sobre nutrición para el triatlón, se midió la tasa de sudoración de los y las triatletas tomando su peso corporal y el de las bebidas y comidas ingeridas en el transcurso, tanto al inicio como al final del entrenamiento. Tras un doble duatlón con una duración aproximada de 1h30´-1h40´ (2K correr + 12K ciclismo con 5K a ritmos altos + 2K correr con 1K a ritmo alto y 1K suave) con transiciones rápidas y un descanso de 10´ entre duatlones, la tasa de sudoración varió desde 0.3L/h hasta 0.75L/h. Sin embargo, en el grupo de triatletas que realizaron un entrenamiento de una distancia mayor (acorde a sus distancias de competición), con una duración total entre 2h3´-2h33´, la tasa de sudoración aumentó hasta 0.5-0.6L/h en las chicas y 0.9-1.1L/h en los chicos.

Además, se trató de analizar la fatiga neuromuscular por medio de la altura de salto y el tiempo de contacto tras 5 saltos unipodales repetidos, con una plataforma de salto (Optogait, Microgate, Italy). Los resultados mostraron una gran variabilidad entre los y las triatletas (promedios desde 8cm hasta 27cm de altura de salto con una pierna), entre extremidades, y entre bloques de duatlones. La mayoría de los y las triatletas que realizaron el entrenamiento de doble duatlón "corto", mejoraron su altura de salto desde el inicio hasta el final (hay una activación neuromuscular tras esfuerzos cortos pero intensos). Sin embargo, los resultados obtenidos en aquellos que realizaron el doble duatlón "largo" fueron más dispares, con grandes pérdidas en la altura de salto en algunos, y ganancias en otros.

Por último, se midió la fatiga metabólica por medio del lactato en sangre en aquellos triatletas que realizaron el entrenamiento de doble duatlón "largo" que tenía el objetivo de mantener la misma intensidad absoluta (medida en vatios en ciclismo, y en min/km corriendo) entre ambos duatlones. Los valores de lactato variaron de 1.8 a 6.2 entre triatletas y la gran mayoría de ellos lo mantuvieron estable entre bloques, incluso disminuyó en aquellos con mayor capacidad aeróbica, a pesar de mantener la misma intensidad absoluta entre bloques.